La creación de Industrias Aeronáuticas y Mecánicas del Estado en marzo de 1952 no solamente introdujo al país la modernización de la industria aeronáutica y las bases de la industrialización automotriz, sino que también propulsó el desarrollo de nuevas tecnologías como ser usos de nuevos materiales, tal es el caso de madera en aviones, plástico en automotores y la propulsión de aeronaves a reacción entre otras.

Al terminar la 2ª Guerra Mundial ingresó al país una gran cantidad de técnicos alemanes con vasta experiencia en aviación, muchos de los cuales pasaron a formar parte del plantel de técnicos e ingenieros de I.A.M.E.

Con el fin de avanzar en la creación de pulso-reactores para impulsar futuras bombas voladoras similares a las V1 utilizadas por Alemania unos años antes durante la guerra, el Ingeniero Günther Dietrich y el proyectista Guido Galán desarrollaron un propulsor montado sobre un chasis de automóvil Justicialista.

El extraño vehículo se realizó en el año 1954, contaba con una rudimentaria carrocería descubierta y pensado para ser usado a modo de banco de pruebas móvil.